Andrea Carandell, CEO de Benito Urban, nombrada nueva presidenta de la Fundación Impulsa
Andrea Carandell, CEO de Benito Urban de Vic, empresa líder en alumbrado y mobiliario urbano, asume la nueva presidencia de la Fundación Impulsa, en un momento clave para la entidad, en el que este 2025 celebrará sus primeros 10 años de vida . La fundación promueve la igualdad de oportunidades entre los jóvenes, ayudando a aquellos que tienen una situación de vulnerabilidad socioeconómica y les acompaña para que puedan cursar ciclos de formación profesional (FP), y mejorar su inserción laboral y su crecimiento personal. Los alumnos becados por Impulsa se gradúan en un 80% en ciclos de FP, muy por encima del 50% de la media catalana. En una década, se han becado más de 650 jóvenes estudiantes, en alto riesgo social, y se han invertido 6 millones de euros en nueve comarcas.
La nueva presidenta ha anunciado las líneas estratégicas de su mandato en los próximos años: “el despliegue de la Fundación en todo el territorio catalán; posicionar Impulsa como entidad referente y de país; seguir ofreciendo la mejor atención y el máximo de personalizada a los jóvenes; introducir la digitalización y la IA como herramienta para ser más eficientes; y poner en marcha nuevos programas como el de emprendimiento o Alumni para cerrar el círculo de acompañamiento integral”. Todo esto, tal y como ha anunciado, lo irá desplegando de la mano de la nueva dirección, encabezada por Rosa Pujols.
Carandell, miembro fundador de la entidad, asumió la presidencia el 27 de noviembre, durante la celebración de un patronato abierto de la entidad, de la mano de Carles Cuyàs, CEO de FredVic, su antecesor en el cargo . La presidenta agradeció la labor realizada por Cuyàs y el equipo, al que dedicó grandes elogios por su gestión y estrategia. La fundación también ha renovado a los miembros del patronato, que es el principal órgano de gobernanza de la Fundación Impulsa. Así pues, se han creado tres nuevas vicepresidencias, que asumen Juli Ferrer (Frigoríficos Ferrer) en el ámbito de las Embajadurías, Marc Rovira (MimCord) en el sector de Alianzas y Captación, y Ferran Castell (Plastin) en el área de Programas. Gil Sansalvador sigue como secretario y Carles Cuyàs (FredVic) y Oriol Lobo (AusaFutur) como vocales.
Impacto social y económico
A lo largo de esta década, la Fundación ha dejado un gran impacto social y económico, ya que ha becado a más de 650 jóvenes en una situación de alto riesgo social, con una inversión acumulada superior a los 6 millones de euros. Actualmente, el radio de acción de Impulsa está en las comarcas de Osona, Garrotxa, Berguedà, Moianès, Bages, Baix Empordà, Anoia y en las ciudades vallesanas de Terrassa y Sabadell. La última apertura, este 2024, ha estado en el Gironès y seguirá creciendo por el territorio. Según detalla la entidad, el 80% de los alumnos se gradúan y el 64% encuentran trabajo relacionado con sus estudios. El perfil de los beneficiados es de un 57% de chicas, con un 30% con informe de riesgo social.
Cataluña, 2030
Actualmente, se están explorando nuevas comarcas para desplegar las becas a los futuros estudiantes de FP en el Alt Penedès, La Selva o el Pla de l’Estany, entre otros. Carandell subraya que «necesitamos nuevas empresas que colaboren con la fundación, así como el apoyo de la Administración pública, para no dejar a ningún alumno sin estudios de la FP». Bajo el lema de «Catalunya 2030», la fundación quiere llegar a todo el territorio catalán, consolidando el trabajo de red de embajadores para impulsar la visibilidad y la capilaridad del proyecto. Actualmente, la entidad cuenta con el apoyo de más de 200 organizaciones de todo el territorio.
La presidenta ha asegurado que su mandato se construirá «sobre las bases sólidas ya existentes», y que lo hará conjuntamente «con el compromiso y colaboración del resto de patrones de la entidad y de los Embajadores de cada territorio», figuras claves en la expansión. Carandell se siente «muy orgullosa» de poder encabezar una tarea social en la que «transformamos vidas y construimos oportunidades reales de futuro» a jóvenes, conocidos como «Impulsers«, que no lo tienen fácil.
¿Cómo se realiza el acompañamiento?
El apoyo a los Impulseros se hace de forma integral, de la mano del equipo psicopedagógico de la fundación, ofreciéndoles acompañamiento en diferentes ámbitos: económico, a través de la financiación de los estudios de FP; tecnológico, con la donación de un ordenador portátil; humano, con formaciones en competencias transversales y haciendo voluntariado en una entidad del territorio; social, con el acompañamiento de una persona mentora, y laboral, con formaciones en competencias profesionales, orientación individualizada, estancias formativas en empresas y acciones para acercar a los jóvenes a la realidad laboral.
10 años construyendo oportunidades de futuro
Durante el acto de nombramiento de la nueva presidenta, se puso de manifiesto que durante los primeros años de la entidad se han sentado las bases de la labor social que hoy realiza Impulsa Bajo la batuta de Carles Cuyàs se ha construido. lo que hoy se llama el Método Impulsa, un proceso robusto de acompañamiento integral a los jóvenes en situación de vulnerabilidad socioeconómica, y con ganas de continuar estudiando, que les permite cursar unos estudios de Formación Profesional y que, pese a los obstáculos, consiguen graduarse en un 80% de los ciclos de FP, muy por encima del 50% de la media catalana.
Carles Cuyàs, en su discurso de cierre como presidente, recordaba los inicios de la Fundación, cuando pusieron en marcha el proyecto los 7 miembros fundadores -entre ellos Carandell- que hoy forman parte del Patronato, y ponía en valor el hecho que fueron capaces de anticiparse a una necesidad que ahora es muy evidente: la carencia de perfiles técnicos de FP en el mundo laboral.
«Desde la innovación social fuimos capaces de poner sobre la mesa una solución a una carencia que hoy tiene el mercado de trabajo», subrayó Cuyàs. En estos 10 primeros años, el crecimiento territorial de la entidad ha sido imparable. “No esperábamos tener el impacto que hemos tenido, y poder ser de tanta utilidad a todos estos jóvenes en situación de vulnerabilidad. Hemos sabido adaptarnos a sus necesidades y construir unos itinerarios individualizados para dar respuesta a su crecimiento personal y profesional”, explicó Cuyàs. No se olvidó de las más de 200 organizaciones que hacen posible Impulsa, a las que agradeció su compromiso y confianza.